Todos los días leemos o escuchamos noticias acerca de "La inteligencia artificial (IA)", una tecnología disruptiva que está revolucionando la forma en que vivimos, trabajamos y nos relacionamos con el mundo que nos rodea.
En la actualidad el uso de estas tecnologías se está volviendo más popular y se utilizan por ejemplo para generar texto, traducir idiomas, escribir diferentes tipos de contenido creativo, crear imágenes, entre sus múltiples aplicaciones.
Uno de los chatbots de IA más avanzado y conocido es ChatGPT, desarrollado por OpenAI. ChatGPT se especializa en el diálogo y la generación de textos. Se basa en el modelo de lenguaje GPT-3.5, una versión mejorada de GPT-3.
En este artículo, analizaremos el posible uso de ChatGPT, enfocándonos en el ámbito de la pediatría. Veremos cómo la IA puede ofrecer beneficios y oportunidades para los pediatras y la población infantil, pero también cómo implica desafíos y riesgos que hay que tener en cuenta y afrontar con responsabilidad y ética.
En pediatría se podría utilizar para:
Más allá de tener el potencial de mejorar o brindar un gran apoyo a la atención médica pediátrica es importante tener en cuenta que ChatGPT es un modelo de aprendizaje automático y no es perfecto.
A continuación, señalamos algunas desventajas de usar la IA en pediatría:
En conclusión, la inteligencia artificial ya está instalada en casi todos los ámbitos, por esta razón es importante usar esta tecnología con precaución y ser consciente de sus limitaciones.
ChatGPT no debe utilizarse para preguntar o buscar consejos acerca de la salud. Si tiene alguna duda o inquietud sobre su salud o la de sus hijos, consulte siempre a un profesional médico.
*La imagen de la portada fue creada con Dall-E que es un sistema de IA que puede crear imágenes y arte realistas a partir de una descripción en lenguaje natural.
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